Casi un centenar con tratamiento secundario
Navarra tuvo el año pasado la capacidad de depurar 95.975.655 metros cúbicos de agua residual en 91 instalaciones que cuentan con tratamiento primario y secundario. El tratamiento secundario garantiza una buena calidad del agua, y sólo es complementado con un tratamiento terciario en caso de que el cauce sea muy sensible y así lo requiere. En cualquier caso, un tratamiento secundario es suficiente para devolver limpia el agua residual a los ríos y conforme a todas las normativas vigentes.
Los casi 96 millones de cúbicos que podrían tratarse en este centenar de plantas suponen una carga contaminante perteneciente a 1.401.262 habitantes equivalentes. Un habitante equivalente es una unidad de medida de la contaminación que lleva el agua residual. Incluye la suciedad generada por las personas censadas y por las actividades industriales, agrícolas, de servicios, etc. Por eso, en Navarra, los habitantes equivalentes duplican con creces el censo poblacional, establecido en más de 620.000 personas.
La cifra real de agua residual tratada es inferior a la capacidad de las plantas y en 2009 se situó en 75.987.890 metros cúbicos, lo que supone una carga contaminante de 1.196.776 habitantes equivalentes. La diferencia entre las posibilidades de tratamiento de las depuradoras y el caudal real permitirá nuevos desarrollos, crecimientos de población y otras expansiones sin tener que modificar las infraestructuras y sin que éstas queden pequeñas. Forma parte de la visión estratégica del dimensionamiento de las instalaciones.