La depuración empieza contigo. Gracias por colaborar · Memorias NILSA

Memorias Nilsa 2011
La depuración empieza contigo. Gracias por colaborar

La depuración empieza contigo. Gracias por colaborar

Suena el despertador, te levantas, vas al baño, tiras de la cadena y abres el grifo de la ducha. Sale fría, esperas unos momentos para que se temple y te duchas. Vas a la cocina, preparas el desayuno y, después, limpias los cacharros en la fregadera. Vuelves al baño a cepillarte los dientes. Cuando terminas, recoges tus cosas antes de salir al trabajo, al colegio, a la universidad, a darte una vuelta, de vacaciones, a la compra... Da igual el destino, lo importante es que has utilizado agua en todas tus acciones al levantarte y has convertido el agua de abastecimiento, limpia, en agua sucia, residual, de depuración.

¿Cuántos litros has utilizado? Los últimos cálculos indican que, en Navarra, cada persona consume entre 160 y 170 litros al día. Esto sin tener en cuenta, por ejemplo, el uso de unas instalaciones deportivas como una piscina. Así que imagina 160 botellas de un litro en fila y piensa la repercusión que podría tener ensuciar su contenido y vaciarlo en los ríos un día tras otro, una persona tras otra, miles de personas, miles de días. Sin tener en cuenta actividades mucho más contaminantes, como las industrias, por ejemplo. Es para pensarlo, ¿no?

Bien, pues expuesta la situación, hemos de decirte que en tu recibo del agua pagas un canon de saneamiento para que existan sistemas de depuración en toda Navarra que garanticen que el agua vuelve a los cauces en condiciones higiénicas y ambientales correctas. Con el canon de saneamiento se financia el Plan Director de Saneamiento de los Ríos en Navarra, que gestiona NILSA y que establece la construcción de depuradoras en todo el territorio foral y su posterior gestión y mantenimiento. Así que, pagando tus impuestos, contribuyes al bien común porque permites que una empresa pública como NILSA pueda hacer su labor y conservar los ríos en buen estado. No obstante, queremos decirte que la depuración empieza contigo, pero no solo en tus impuestos, sino también en tus actitudes. Porque educar a la ciudadanía permite sociedades más avanzadas, más respetuosas, más sostenibles y más eficientes, en las que no todo se resuelve con dinero. 

En este apartado exponemos unas pautas de actuación, que esperamos que te resulten útiles. Además, te presentamos una vez más la oferta educativa, que 18.000 personas ya han tenido la oportunidad de disfrutar en cursos anteriores. Esperamos que tú seas de los próximos, si todavía no lo has hecho, o incluso si lo has hecho ya.