Depuramos menos porque lo hacemos mejor · Memorias NILSA
Memorias Nilsa 2011
Depuramos menos porque lo hacemos mejor
Cada año depuramos menos, lo cual quiere decir que somos más eficientes, trabajamos mejor. Vamos a explicarlo claramente: en 2011 Navarra depuró menor volumen de agua residual que en 2010 y este año, a su vez, el volumen fue menor que el anterior. Esto no implica que operemos peor sino todo lo contrario: supone que el consumo de agua es menor -y eso es de agradecer a toda la sociedad porque es un bien escaso y despilfarrado- y que caudales que proceden del agua de lluvia y que no deben ser depurados, ya no van a parar a las instalaciones porque se han producido importantes mejoras en las redes de saneamiento municipales -cuestión que es competencia municipal y que también es de agradecer a las entidades locales-.
Como ya explicamos en 2010 a propósito de la defensa del drenaje sostenible, la exclusión de las aguas pluviales de los colectores que conducen el agua hasta las instalaciones es un logro en cuanto que supone ahorro de costes, optimización energética y menor impacto ambiental, ya que el agua se filtra allí donde cae y no es trasladada hasta la depuradora para un tratamiento que no necesita. De esta manera también fomentamos el drenaje urbano sostenible, que consiste en la construcción de firmes y suelos que permiten que el agua no sea canalizada de forma artificial, evitando la erosión de los suelos, la desertificación de los acuíferos, los alivios de las redes, el desplazamiento de taludes y muchos otros problemas constructivos que derivan en medioambientales.
En cuanto a cifras concretas, podemos decir que el año pasado Navarra trató 70,01 hectómetros cúbicos frente a los 77,75 hectómetros cúbicos de 2010 y los 82,13 hectómetros cúbicos de 2009.
La mayoría de las instalaciones de depuración de Navarra son gestionadas por NILSA, si bien la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona se responsabiliza de tres depuradoras, entre las que se incluye la mayor del territorio foral: Arazuri. Es especialmente importante porque trata el agua residual de toda la cuenca de la capital y porque el río al que devuelve el agua, el Arga, presenta un tramo sensible tras su paso por la capital y esto implica que hay que velar por su estado ecológico con especial esmero. Por su parte, la Mancomunidad de Montejurra gestiona una decena de instalaciones en la zona de Tierra Estella.
Para consultar las características particulares de cada instalación, la tecnología que aplica y los rendimientos que obtiene, se puede consultar el mapa de depuradoras de la web corporativa a través del enlace inferior.